Los trabajos de Mendieta siempre hicieron foco en la denuncia social, antropológica y cultural sobre el sufrimiento del cuerpo femenino y las corporeidades no hegemónicas en la sociedad occidental capitalista, y es esa misma denuncia la que continúa hoy rodeando las sospechosas circunstancias de su muerte ocurrida en 1985: mientras compartía un departamento en Nueva York junto a su esposo, el escultor Carl Andre, un grupo de vecinos escuchó una violenta pelea entre la pareja que minutos después culminó con el cuerpo sin vida de Ana sobre la calle a la que asomaba la ventana de su vivienda. Para seguir leyendo…
1 comentario
Diana Alvarez Amell | 05/08/2018 - 12:08:14
Buenos días (tarde): al principio vi con gran entusiasmo el trabajo de Mendieta: esas huellas antropológicas al principio me impresionaron. Vi una en el MOMA de NYC.
Fui entonces hace años a la exposición en NYC (creo que fue en el MOMA o habrá sido en el Guggenheim? hay un libro de la expo) y te aseguro que me dejó decepcionada. (Yo que había pontificado en clase sobre la presencia de la sangre en las artes de las mujeres), llega un punto en que la neurosis supera el arte. Conocí hace varios años a una artista de Soho que me dijo que los había conocido y que los dos tanto Mendieta como Andre eran muy violentos (ella me insinuó que los dos se entraban a golpes).
Luego en NYC se ha hablado de la violencia de género y contra las mujeres «de color» (es curioso, la frase que me suena a mis abuelos aquí está de moda en inglés, es progre y los norteamericanos están convencidos que ellos son los blancos y los que hablan español no lo son). Me llama la atención porque cuando he enseñado la cultura e historia latinoamericana desde la conquista hasta hoy he dado cuenta de que ha habido desde entonces una lucha hemisférica por territorio entre quienes hablan inglés y español. Of course, la empezaron los ingleses cuando dijeron que solo los españoles mataban y ellos no.) Es muy temprano en la mañana, pero y todo por la presencia de la sangre. Que tengas un día agradable.
Buenos días (tarde): al principio vi con gran entusiasmo el trabajo de Mendieta: esas huellas antropológicas al principio me impresionaron. Vi una en el MOMA de NYC.
Fui entonces hace años a la exposición en NYC (creo que fue en el MOMA o habrá sido en el Guggenheim? hay un libro de la expo) y te aseguro que me dejó decepcionada. (Yo que había pontificado en clase sobre la presencia de la sangre en las artes de las mujeres), llega un punto en que la neurosis supera el arte. Conocí hace varios años a una artista de Soho que me dijo que los había conocido y que los dos tanto Mendieta como Andre eran muy violentos (ella me insinuó que los dos se entraban a golpes).
Luego en NYC se ha hablado de la violencia de género y contra las mujeres «de color» (es curioso, la frase que me suena a mis abuelos aquí está de moda en inglés, es progre y los norteamericanos están convencidos que ellos son los blancos y los que hablan español no lo son). Me llama la atención porque cuando he enseñado la cultura e historia latinoamericana desde la conquista hasta hoy he dado cuenta de que ha habido desde entonces una lucha hemisférica por territorio entre quienes hablan inglés y español. Of course, la empezaron los ingleses cuando dijeron que solo los españoles mataban y ellos no.) Es muy temprano en la mañana, pero y todo por la presencia de la sangre. Que tengas un día agradable.